Cada vez más, las empresas se están alejando de la infraestructura física gracias a los servicios provistos por empresas de informática Cloud como OnWork IT & Cloud. Microsoft y WSP USA llevaron a cabo un estudio que revela que la computación en la nube es más eficiente desde el punto de vista energético y emite un 98% menos de carbono que los centros de datos OnPremise. El informe también muestra que la migración a la nube pública podría reducir las emisiones de carbono en 59 millones de toneladas al año, el equivalente a retirar 22 millones de coches de la carretera.

Por otro lado, los escritorios remotos facilitan el teletrabajo a los empleados, favoreciendo la reducción de emisión de CO2 al no tener que acudir presencialmente a las oficinas, en transporte privado o público. El soporte técnico, a través de herramientas de ticketing o atención telefónica, también ayuda a evitar desplazamientos y reducir la polución.

El uso de la computación en la nube puede reducir de manera tangible el impacto negativo que el negocio tiene en el medio ambiente. La promoción interna de las reuniones en línea puede ser un buen ejemplo, mediante aplicaciones de reunión virtual y gestión como las de Microsoft 360. Es por eso tan importante que las empresas inviertan en infraestructura verde: cuanto más crezcan los proveedores de nube, mayor será su inversión en innovación. Esto es, crearán centros de procesamiento de datos (CPD) de eficiencia energética y que estén basados en el autoconsumo.

El equipo en local de las empresas queda obsoleto con más rapidez y multiplica así los residuos electrónicos cuando el equipo alcanza su obsolescencia. Los servidores Cloud permiten mayor flexibilidad y adaptación a la situación de la empresa.

¿Por qué tener servidores físicos cuya capacidad nunca se alcanza? La vida del producto tiene sus limitaciones, independientemente de si está siendo usado de forma óptima o no. Con la nube se gasta según lo que se necesita, escalando o desescalando en función de la situación y circunstancias de la empresa. De esta manera, no es necesario adquirir o desechar recursos físicos con cada cambio y se evita generar residuos electrónicos con tanta frecuencia.

 

OnWork IT & Cloud, una empresa eco-friendly

Como comentábamos, los proveedores Cloud favorecen la desmaterialización de los servidores en local. Migrar una empresa a la nube con OnWork quiere decir que las máquinas físicas, que emiten un alto nivel de carbono, son sustituidas por máquinas virtuales. Esto reduce considerablemente la huella de carbono de las empresas. A la vez, el consumo energético en la nube es muy inferior, puesto que los servicios virtuales ahorran consumo, reducen los costes y el impacto medioambiental.

Los servidores ubicados en cada empresa generan un consumo eléctrico muy alto, siendo necesaria una ubicación, normalmente con aire acondicionado todo el año para evitar sobrecalentamiento, que genera un gasto económico para la empresa fijo cada mes. Centralizar en la nube los diversos servidores de empresas en un solo centro de procesamiento del proveedor Cloud logra evitar el consumo eléctrico en cada una de las empresas.

Las fuentes de energía de OnWork son renovables, con placas solares que sustentan el consumo eléctrico del CPD y el resto de instalaciones. Lo mismo ocurre con los equipos de Barcelona. La corporación cree en la sostenibilidad, el autoconsumo y la importancia de reducir la huella ecológica, especialmente en las empresas.

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